la piel tostada como universo en la noche,
abrazo tu mente, tu corazon de cacao.
Licor en los labios, mi alma suda,
te quiero de color azul,
hasta que exprima el alma.
Soy la que vuela, la que te ama,
la que espera después de una larga oscuridad,
la que te recorre la piel en pensamientos.
Soy la que te desespera, pero esperas,
soy el silencio de tus pensamientos,
la que abre las alas y te abraza.
Soy la magia en tu sobriedad,
la que bendice mi incredulidad,
y te llamo, mil veces te llamo.
Pero vuelo cuando te abrazo,
cuando aprieto tus manos sobre el pecho,
corazon de cántaro de barro...
Rebeca Fregoso